A._ Si la persona manifiesta que ha dejado de asistir... ¿Preguntarle que le pasó? ¿Por qué dejó de asistir?

Usar la Palabra para derribar todo argumento y adicional Testificarle de los milagros, las sanidades, la Palabra, la Presencia de Dios que hemos estado experimentando en medio nuestro durante los servicios. Para motivarlos e inspirarlos a que regresen a congregarse.

Pregúntales cuál ha sido su experiencia mientras  ha asistido a los servicios

En caso que la persona manifiesta que no asiste pero que se conecta virtualmente, preguntarle si vive acá, de ser así... mostrarle por la Palabra la importancia de ir a la Casa de Dios, la bendición que se desata desde ese lugar y congregarnos juntos... La especial atención que tiene Dios hacia lo que se hace desde Su Casa.

Compartirles los horarios de todos los servicios, brindarles la dirección y darles una guía de cómo llegar desde el lugar donde se encuentran.

Si la persona vive en otra ciudad, manifestarle que el poder de Dios no tiene límites y que hemos comprobado que aún a la distancia Dios ha obrado milagrosamente en muchas vidas.